Muchos sabéis que una de mis pasiones es leer libros de empresa o economía. Me agrada entender y ser partícipe, junto con los stakeholders más cercanos a negocio, de aquellas decisiones que luego deberá la tecnología hacerlas realidad. Nunca me he caracterizado por estar solo en el lado técnico de las cosas. Hay que verlas nacer, entenderlas y, perdonad, parirlas.
Es por ello que me agradaría hacer un pequeño decálogo de lo que yo considero como premisas de éxito para poder llevar a cabo casi cualquier proyecto de negocio y me agradará listarlas y comentarlas muy brevemente. Las siguientes:
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No todo es Marketing. ¿Qué quiero decir con esto?. Pues muy fácil: el valor de la marca empresarial radicará en la experiencia y en la gente.
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Responsabilidad con el cliente. Todas las empresas deben estar enfocadas al cliente. No sólo se trata de ganar más dinero y aumentar el valor de una marca, nunca olvidaremos a nuestros clientes. Ah, hacer un workshop con clientes, poner una pestaña de feedback en la web, etc… no es solamente esto. Es tenerlo en el ciclo de vida de productos, servicios, etc…
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Sentido de pertenencia. Muchas veces solo nos centramos en nuestros clientes, cuando,en nuestra organización ya tenemos clientes. Los empleados son socios de nuestra organización, al final, es nuestra organización, la de todos y todas. Si abrimos los pdoeres de decisión, entenderán que no sólo trabajan en la empresa, sino que son parte de ella y compartirán su éxito.
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Sinergias. Las grandes organizaciones son exitosas no sólo por el producto, servicios o tecnología que puedan tener, sino porque construyen lealtad y confianza entre sus clientes y entre sus empleados. Al igual que tienen puentes con otras organizaciones para ir mucho más lejos.
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Cultura laboral. Las grandes estrategias y ejecuciones sólo triunfan por una gran cultura laboral y tienen en común una característica: confianza. Ésta te servirá para navegar tiempos difíciles y salir adelante.
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Rendirse no es posible. Hay que pensar en ganar, ya sea en una empresa o la propia. Habrá gente que diga que sueñas muy alto, pero no dejes que nadie te diga que dejes tus sueños.
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Equipo. Hay que rodearse siempre de gente experimentada, inteligente y con altos valores de vida. Además, no olvides que la disciplina es la más importante herramienta para el éxito.
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Emprender. El emprendimiento es una palabra elegante, pero son pocos los verdaderos emprendedores. Lo son aquellos que vienen de la nada con un sueño y son capaces de hacer algo que los demás no vieron.
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No olvidemos nuestros orígenes. Nunca será suficiente ser exitoso si no permitimos ser parte de ese éxito a la gente que nos ha rodeado, ayudado y empujado hacia el éxito como puede ser, por ejemplo, nuestra familia.
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Innovación. Cada organización debe entender el significado de la innovación. Ésta debe ser disruptiva. Debemos crear una nueva forma de hacer las cosas y separarnos de nuestros competidores.
